Contestamos a la gran pregunta de estos días ¿Qué hago con mi dieta en Navidades?
Ahora que se acercan las Navidades muchas personas que siguen dietas para perder peso expresan una imposibilidad de seguir la dieta en estos días de fiestas.
Esta idea ya nos demuestra que hay errores en la metodología que se sigue referente a lo que se debe hacer para perder peso.
Para perder peso no es necesario seguir unos menús cerrados ni pesar todo lo que se come o no poder probar nada de lo que a uno le guste; se trata de comer armónicamente, variado, en menor cantidad de lo que tiene más calorías, con una base de dieta rica en vegetales, cereales integrales, legumbres, frutas, alimentos proteicos de calidad y bajos en grasa, etc.
A la vez que respetando una serie de hábitos alimentarios saludables, por ejemplo: comer despacio, planificar las comidas o hacer una compra de alimentos responsable.
Así que ahora que se acercan las Navidades todo esto se puede mantener igual, añadiendo algún alimento de más pero sin perder las bases de sentido común de dieta saludable.
Por otro lado, si se está en un proceso de pérdida de peso, las Navidades, igual que unas vacaciones o otras épocas irregulares en horarios, puede que no sean el mejor momento para perder peso, ya puede ser un buen objetivo mantener el peso en estas fechas.
Es totalmente posible preparar comidas apetecibles que sean saludables, así como comer pequeñas raciones de los platos típicos más calóricos que se preparen en casa. También ajustar los menús de tal forma que se ofrezcan entrantes ligeros si hay un segundo plato más contundente o plantear otros postres alternativos a los dulces.
Hay muchos consejos referentes a la dieta que se pueden dar orientados a evitar los excesos de comida en estos días, hoy nos centraremos en dos, entendiendo que es mejor focalizarse en pocas ideas claras.
- Regalar, dar, congelar… todos los restos de comidas que queden de los días festivos (canelones, dulces, patés, quesos, turrón, botellas de alcohol…). Es muy típico que los restos que han quedado de los días festivos se acaben en los días posteriores, que no son ninguna celebración especial. Así que de este modo se está comiendo 2 o 3 veces más.
- Evitar llegar a las comidas con hambre. Precisamente los días de celebraciones se acaba comiendo mucho más tarde de lo habitual, ya sea porque la familia se retrasa o porque queremos esperar a cenar lo más cerca posible de las campanadas. Esto aumenta la predisposición a excederse ya que si el horario de comer habitual es a las 14h resulta que este día estamos alargando la espera una o dos horas más. Es muy recomendable comer algún alimento ligero antes, puede ser una manzana o un vaso de zumo de tomate o un caldo, para así llenar un poco el estómago y ser más capaces de limitar la cantidad de que se coma.
En esta reflexión que presentamos hoy tenemos que hablar también de otro factor que incide directamente en el control del peso: la práctica de ejercicio físico. Aumentar la actividad física puede que sea la única forma de compensar las calorías extra que se puedan ingerir en Navidades. Así que pensad en incluir alguna caminata extra o algún partido de pádel o tenis con algún familiar ya que esto puede ser el mejor aliado para controlar el peso en estas fechas.
Mantener un estilo de vida saludable es totalmente compatible con disfrutar de las Navidades, así que esperamos que tengáis unas felices fiestas en todos los sentidos.
Equipo de Nutrición de Clínica ServiDigest